miércoles, 1 de febrero de 2017

EL COLOR DE LA EMOCIÓN

Tras permanecer mucho tiempo sepultadas bajo el imperio de la razón, las emociones se han convertido en los últimos tiempos en un área fundamental de estudio de la psicología. Vamos a conocerlas un poquito más a fondo...

FUNDAMENTOS

Las emociones, según un consenso casi universal y generalizado, aparecen cumpliendo una función.



A pesar de que no aprendemos a emocionarnos (ya que es una especie de reacción fisiológica) sí aprendemos de qué nos emocionamos. Este aprendizaje es dinámico y puede experimentar cambios importantes:

  ü Un mismo estímulo puede desencadenar diferentes emociones en una misma persona. Un ejemplo de esto sería un lugar donde antes estábamos a gusto puede provocarnos ahora aversión.

  ü Un mismo estímulo puede desencadenas emociones diferentes en diferentes personas. Un ejemplo de esto sería la cucaracha, animal que puede desencadenar asco en una persona e indiferencia en otra.

Las emociones siempre son reales y sólo se producen en el presente, aunque los estímulos que las desencadenan puedan no serlo. Es decir, nos podemos emocionar con información virtual. Un ejemplo de esto sería lo siguiente: podemos experimentar un miedo real ahora por una visita al dentista que tenemos mañana. Esta habilidad puede ser de gran utilidad si se usa bien, pero puede convertirse en un problema importante mal utilizado.

EMOCIONES POSITIVAS VS. EMOCIONES NEGATIVAS

Han sido múltiples los intentos de clasificar las emociones. Entre ellos está el que las divide en positivas y negativas. La función de estos dos grupos de emociones es muy diferente. El término negativo parece hacer referencia a algo que sería mejor evitar o eliminar, pero la verdad es que las diferentes emociones que conforman este grupo (miedo, tristeza, ira) son esenciales para la supervivencia. Así, las llamadas emociones negativas aparecen para solucionar problemas de supervivencia inmediata porque tienen asociadas tendencias de respuesta específicas:

ü Ira: prepara para el ataque.
ü Asco: provoca rechazo.
ü Miedo: prepara para la huida.

Se trata de señales de alarma que nos avisan de que algo no funciona. Por tanto, conviene escuchar muy bien qué nos están diciendo estas emociones cuando aparecen. Además las emociones nos impulsan a actuar y nos ayudan a responder de forma adaptativa al entorno que nos rodea.



Las emociones “negativas” sirven para capear el temporal, pero no para dirigir la nave.

Las emociones positivas en cambio están relacionadas con el desarrollo, el crecimiento personal y la conexión social. Nos lleva a estados mentales y formas de conducta que nos prepara para enfrentarnos con éxito a las dificultades y adversidades, así como contribuyen a la construcción de recursos personales.

Los estados de ánimo positivos nos predisponen a adoptar una manera de pensar creativa, tolerante, flexible, constructiva y generosa. Incluso pueden potenciar nuestra salud.

En opinión de la psicóloga BárbaraFredrichson, con su Teoría de la Ampliación y Construcción, cuando las personas incrementan su dieta diaria de emociones positivas encuentran un mayor significado y propósito en su vida. Se sienten más eficaces, aumentan las relaciones positivas con los demás y duermen mejor.



Un rasgo característico de las emociones es que pueden desencadenarse automáticamente a gran velocidad y de forma ajena a nuestra conciencia.

Dos habilidades a destacar en relación al concepto de Inteligencia Emocional (IE) son:

  ü Percepción de las emociones: se trata de reconocer el tipo de emoción, ponerle un nombre y responder a la pregunta ¿qué estoy sintiendo ahora?

  ü Regulación emocional: hace referencia a la posibilidad de controlar y cambiar nuestros estados emocionales. Para contrarrestar una emoción negativa es preciso disponer de una emoción positiva aún más fuerte que la neutralice. Para ello nos podemos servir de:

                        -Estímulos
                        -Cambios corporales
                        -Pensamiento



Ejemplo: si estamos tristes podemos neutralizar este estado creando uno de alegría a través de:

-Estímulos: fotos alegres, música, paseos por la naturaleza…
-Cambios corporales: postura erguida, mirada serena,  respiración armónica…
-Pensamiento: crear contenidos mentales relacionados con la alegría (ideas positivas, pensar en nuestros puntos fuertes, en lo        que nos ilusiona…)


LOS 7 PASOS DE LA GESTIÓN EMOCIONAL

Tengamos en cuenta los siguientes 7 puntos para nuestra buena gestión emocional: la calidad de la experiencia que tengamos dependerá, en gran medida, de las emociones vividas. De ahí la importancia de su gestión.


1.   Congruencia entre memoria y estado de ánimo (EA): tendemos a recordar experiencias asociadas a nuestro EA actual. Por ejemplo, si estamos alegres, recordaremos cosas alegres.

2.  Cuidado con quedar atrapados: a menudo, en lugar de tomar las emociones negativas como señales de alarma quedamos atrapados en ellas. Esto no es un problema en sí mismo si la situación lo requiere (estamos mal por perder un trabajo) pero sí lo es si este estado llega a interferir en el desarrollo normal de nuestras vidas.

3.    Dulcificar la vida: hay muchas formas de amargarse la vida pero hay otras tantas de endulzarla, y está en nuestras manos cambiar el punto de vista a la hora de interpretarla.

4.     Seleccionar lo que nos emociona: la mayor parte de lo que nos emociona lo hemos aprendido, pero tenemos la capacidad de seleccionar lo que nos merece la pena que nos emocione. Pregúntate pues ¿qué es digno de mi emoción?

5.     Desensibilización: podemos cambiar lo que sentimos por algo. Podemos haber adquirido miedo a subir en ascensor pero no estamos condenados de por vida a tener miedo cada vez que entremos en uno. Podemos aprender a relajarnos y a mantenernos en ese estado incompatible con el miedo al entrar en él.

6.  Crear condiciones: está en nuestra mano fomentar la presencia de emociones positivas en nuestras vidas.

LOS EFECTOS DE LAS EMOCIONES POSITIVAS
ü Indulgencia en los juicios hacia los demás y hacia uno mismo.
ü Codifica y recupera mejor los recuerdos positivos.
ü Amplía el campo visual.
ü Pensamiento más flexible y creativo.
ü Genera más repertorio de conducta.
ü Reduce la duda.
ü Fomento de conductas altruistas.
ü Contrarrestan afectos negativos.
ü Aumenta la tolerancia al dolor físico.
ü Favorece la resistencia ante las adversidades.
Los EA y las emociones positivas han mostrado en muchos estudios evidencias de tener unos beneficios significativos sobre la conducta. De ahí la importancia de tener recursos para gestionarlas en detrimento de los EA negativos.

Las emociones positivas frecuentes son el sello distintivo de la felicidad.

REFERENCIAS

http://www.investigacionyciencia.es/blogs/psicologia-y-neurociencia/37/posts/el-equilibrio-emocin-razn-13590
https://es.pinterest.com/silanfra/educaci%C3%B3n-e-inteligencia-emocional/
http://www.centropsicologicobienestar.com/funciondelasemociones.htm
http://psicologamadrid-habilidadessociales.blogspot.com.es/2013/03/que-son-las-emociones.html
http://jaimeburque.com/blog/%C2%BFpara-que-sirven-las-emociones-positivas/
https://es.pinterest.com/explore/emoticone-clin-d-oeil-952401844386/
http://www.bemocion.msssi.gob.es/gl/emocionEstres/emociones/manejoEmocional/inteligenciaEmocional/home.htm

HUMOR


Espero que os haya gustado. ¡Nos vemos en el próximo artículo!


Fuente: Revista Integral
Escrito por: Mayte Moreno

No hay comentarios:

Publicar un comentario